23/11/07

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Y yo no estuve en tu cumpleaños, apenas habías salido del hospital donde te visité con tu batita y todo, pero no fui a tu cumpleaños, con eso de andar por los suelos por mil tonterias: que me dejaron, que me rompieron el corazón, que me doliá; yo dejando que todo eso me consumiera y no, no fui a tu cumpleaños.

No importa cuanto te lloré esta noche, ni que no pueda dormir y espere ya que sea la hora de volver a verte ( te lo prometi hace apenas una hora, dije que nos veimas al rato), no importa que este decidida a seguir de pie hasta el último momento en que pueda verte, de cualquier forma, no fui a tu cumpleaños.

Te quiero mucho, me canse de repetirtelo hoy, casi sin decirlo, te quiero tanto porque lo mejor de los sábados por la noche eran tus chistes, porque cuando llegabas a las fiestas sabía que me acompañarias a mi casa porque tu eras así, cuiadas a las niñas, me cuidaste varias veces, nos cuidabas.

Todavía no me queda claro que despues del cepelio ya no volveremos a verte. No sé como explicar o llamar de otra manera a lo inevitable, sólo sé que esta noche todos estuvimos ahí, sé que nos viste y te burlaste de nosotros, sé que sabes las razones por las que no fui a tu cumpleaños y sé también que que te vas a quedar aquí por siempre.


Esta vez va una a tu salud, ya vez como son las cosas, una tratando de jugar a ser normal, con clases aburridas, quejandose vagamente de tonterias, apenas escribiendo reclamos pendejos de lideres estudiantiles, apenas lloriquiando por que la gente se va, porque el amor se nos escapa, amariconandose pues, mientras tu del otro lado despidiendote. Te voy a extrañar mucho. Todos vamos a hacerlo, hoy no te nos fuiste y en unas horas no vamos a enterrar a nadie, la muerte no existe Erik, tu nunca te fuiste.

2 comentarios:

Antonio Mundaca dijo...

lloverá donde la tierra este más seca....

Said dijo...

Me dejaste la piel de gallina.